martes, 31 de agosto de 2010

Vísperas.

Estoy a la espera de la llegada de mi cumpleaños número veintitrés. Sí sí, soy una nena, prácticamente todo el mundo me lo dice, pero básicamente porque no luzco como una "nena" de veintitrés, sino de bastante más. Igual, si soy sincera, no relaciono eso con algo negativo, no me parece que este destruida. La edad no es algo tan terrible como la mayoría piensa.

El año pasado, si no me equivoco el mismo día que hoy, hice un post alusivo a mis cumpleaños (es éste). Lo acabo de releer y reafirmo mi decisión de festejo de cumpleaños: no lo voy a festejar.

Hoy vienen unos compañeros de la facultad a cenar, sólo porque miamiga Carola me hinchó las pelotas para que hagamos al menos una pequeña celebración. Mañana, quien quiera pasar a darme un beso y tomar unos mates, está bienvenido, pero no crean que voy a hacer mucha parafernalia. A las siete de la tarde me subo a un micro rumbo a Tandil a festejar mi cumpleaños (y el de una de mis madres) con mis madres. Este año he decidido regalarme unas pequeñas vacaciones improvisadas.

Qué relajo...

1 comentario:

Mónica Pavón Mardones dijo...

Veo que toda la gente importante cumple años en Agosto. Notable :D

¡Felicidades!