viernes, 9 de noviembre de 2012

Top 5 de pedorreadas de días de lluvia

(Top 10 me parecía demasiado y quejarme de sólo una cosa requiere de bastante tiempo para pensar)

Puesto N°5
Que la lluvia te agarre en ojotas o sandalias. Mejor aún, que sean de goma, así duele más cuando te roza el pie húmedo.

Puesto N°4
Los paraguas que nunca abren cuando más te estás empapando o, en su defecto, los que se abren sorpresivamente, generalmente en el interior de una casa.

Puesto N°3
Las baldosas flojas, que logran casi siempre disfrazarse de baldosas regulares y bien aferradas al suelo. Generalmente muestran su verdadera esencia en el mismo momento en que te das cuenta que no pisaste una desde que saliste de tu casa.

Puesto N°2
Las personas que, encerradas en su auto y habiendo perdido el recuerdo de qué se siente el ser un peatón, doblan en las esquinas a la mayor velocidad posible generando un efecto "orca zambulléndose (¿se escribe así?) en el agua" diréctamente en tu cara.

Puesto N°1
Los gomas que en Facebook o cualquier otra red social comentan "Lluvia... ¿Quien quiere hacer cucharita?" Nadie, goma. Y menos si lo decís por Facebbok.


lunes, 5 de noviembre de 2012

Me molesta...

... que me dejen atados de puchos vacíos en mi casa. Es verdad, no es que los dejen tirados en el piso. Pero si una se pone a pensar, ¿existe realmente una gran diferencia? Digo, si alguien deja cáscara de fruta en el piso, ¿no es lo mismo que si la deja sobre el mantel? ¿No es basura de todas maneras?

... que los varones que van a casas de mujeres no bajen la tabla del inodoro después de hacer pis. Puede que les parezca de histérica e hinchapelotas, pero al menos soy de las que cuando va a casas de varones, vuelve a levantar la tabla después de usar el inodoro. Aunque tengo la leve sospecha de que ninguno se da cuenta y de que, probablemente, les chupe un huevo que lo haga.

... que mi gata me haga quedar mal. Es decir, cuando estamos solas, como ahora, es una santa. No llora, duerme y juguetea con bichos y papelitos. Sin embargo hace falta que venga una, UNA persona a visitarme, para que empiece a gritar como loca, poniendo a prueba la paciencia de más de uno. Hace cinco minutos, como estaban mis compañeras de la facultad, andaba por ahí haciendo escándalos. Ahora, ni mu. O mejor dicho, ni miau.

... que los autos sigan avanzando cuando el semáforo está en rojo. Ya sé que ya escribí sobre esto. Pero lo siguen haciendo. También me molesta que los autos no usen la puta luz de giro. Y, para colmo, te putean cuando vas a cruzar y casi te atropellan. Quitando el hecho de que la prioridad es del peatón, ¿qué se piensan? ¿Qué tengo alguna otra forma oculta de saber si van a doblar? Si la hay, por favor, que me avisen.

... que hace tanto, pero tanto que no entro al blog, que nuevamente cambió todo y me siento otra vez primeriza, experimentando y re-aprendiendo.

No, pará. Eso en realidad no me molesta.