(No lo sé en más idiomas)
Mañana es mi cumpleaños. Dulces 22. Nunca entiendo por qué la gente se deprime cuando cumple años. Nunca entendí por qué mis compañeritas de colegio comenzaron a paranoiquearse cuando empezaron a cumplir 16, 17 (los quince no les causó pánico porque significaba una gran fiesta, un vestido de merenguito y muchos pero muchos regalos).
Mañana es mi cumpleaños y decidí hacer una reunión en casa. No tengo ganas de hacer una fiesta, no tengo ganas de tener que limpiar pegote de cerveza del piso al otro día. Además mi cumpleaños cae martes... ¡Qué berreta! Hace mil que no me toca sábado... Me acuerdo que una vuelta que me iba a tocar, fue año bisiesto y el muy h.d.p. se pasó para el domingo... Claro, hice la gran "Festejo después de las 12" el sábado. No soy una gran... Fiestera. Antes lo era, me gustaba la fiesta. Pero me puse... ¿Vieja? Naaaa... No sé si es eso, pero ya la fiesta no me hace disfrutar tanto como una reunión.
Leve retrospectiva:
2008: Cayó lunes. 21 años, la mayoría de edad. Todo el mundo diciéndome "Ahora, si te mandás una cagada, vas presa seguro". Ja... Estuvo buenísimo, hice reunión el mismísimo lunes y nos quedamos boludeando hasta las 4 de la mañana... Mi mamá, exagerada como siempre pero igual de amorosa, me compró 400 ságuches de miga, 2 tortas de cumpleaños y 20 botellas de bebida.
2007: 20 años. Fiesta del Pijama en casa... Wow. Lo más divertido de esto fue que la gente vino fehacientemente en pijama. Mis amigos habían decorado la casa muy copadamente, muchos pijamas colgando y cosas alusivas... La gente tomaba cerveza en tazas de desayuno... Pero bueno, ya lo dije, no soy muy fiestera... A las 4 de la mañana caí destrozada en mi cama, mientras la fiesta continuó en mi living, con un compañero impertinente de la facultad que me preguntaba si no le prestaba la cama para hacer un trío... Wow...
2006: Esta fiesta fue un descontrol. 19 años. Hacía un mes que había vuelto de Suecia del intercambio, así que hice cumpleaños + bienvenida. Fiesta de disfraces con pizza, tonel de bebidas y tortas dulces. Lugar, la casa antigua sin refaccionar, completamente vacía, que luego pasó a ser mi trabajo. Disc jockey, ambientación... Muchos globos y almohadones en el piso. Invité a 70 personas. Para la una de la mañana ya había 100. Yo, de hiedra venenosa, terminé a las 5 de la mañana bailando sobre una silla en zapatillas y gafas, gancia en mano. Todos disfrazados. Genial.
2005: Este cumpleaños fue terrible. Estaba en suecia, hacía un mes que había llegado. Cumplí los 18 cenando con mi mamá y mis hermanitos suecos. Le pusieron TODA la onda, fueron buenísimos conmigo. Pero estaba en un país desconocido hacía recién un mes, todavía no había conocido a nadie. Y para colmo se cortó internet... Fue bastante feo. Cabe destacar, de todas maneras, que mi hermanito sueco David me levantó el ánimo saltando y resaltando en la cama elástica. Un fuego.
No sigo para atrás porque, realmente, no lo recuerdo.
Acabo de encargar unos sánguches de miga, tendría que ir a comprar las cosas para hacer la torta... No tengo ganas. Mejor me fumo un pucho y miro la tele. Mañana voy a tener tiempo para todo lo demás.
Ya les contaré :)
